Hay quienes aseguran que la diferencia de costos entre los buques de la región y los de conveniencia es de 4 a 1.
Redacción Argenports.com
Finalmente el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, emitió un decreto haciendo pública su decisión de no renovar, a partir del 5 de febrero de 2022 y del 7 de octubre próximo, los acuerdos sobre transporte marítimo que mantiene con Argentina y Uruguay.
La resolución fue publicada hoy en el Boletín Oficial de la Unión y permitirá el ingreso de buques mercantes de extrazona.
Esto supondrá un duro desafío porque mientras Argentina y Brasil tienen una relevante carga impositiva y laboral, en el mundo crecen los “buques de conveniencia”, con armadores que inscriben los buques en países con legislación muy laxa y bajísimos impuestos, por caso Panamá, Liberia o Islas Marshall.
El paso dado por Bolsonaro fue incluso duramente cuestionado por los armadores brasileños, quienes ven también peligrar sus negocios con Argentina y Uruguay.
La drástica decisión del mandatario brasileño fue dada a conocer hoy por medios de prensa de ese país y supone un golpe más a las posibilidades de recuperación de la flota nacional y al futuro de una docena de empresas navieras.
Estas ven amenazadas sus posibilidades en el tráfico comercial marítimo desde Tierra del Fuego a Recife, con puertos de relevancia Bahía Blanca, Buenos Aires, Zárate, Rosario, Porto Alegre, Santos, Río Grande, Río de Janeiro y Paranagua.
El decreto de Bolsonaro da de baja al Acuerdo sobre Transporte Marítimo entre la República Federativa del Brasil y la República Oriental del Uruguay, suscrito el 12 de junio de 1975, y, a partir del 5 de febrero de 2022, la vigencia del Acuerdo sobre Transporte Marítimo entre la República Federativa del Brasil y República Argentina, celebrada el 15 de agosto de 1985.
Según una nota de la Secretaría General de la Presidencia de la República, "la medida contribuye al proceso de adhesión de Brasil a la OCDE [Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico], que es una de las prioridades de la política exterior brasileña, además para fomentar la competencia y la competitividad en la prestación de servicios en el sector”, expresó el portal Hora Campinas.
El medio brasileño recordó que la decisión fue tomada en la 2da Reunión Ordinaria del Consejo de Estrategia Comercial de la Cámara de Comercio Exterior (Camex), realizada el 9 de diciembre de 2020, y fue comunicada al Gobierno de Uruguay el 9 de febrero de 2021 y al Gobierno de Argentina el 3 de febrero de 2021, según informó la Secretaría General.
Según el gobierno de Bolsonaro, la posibilidad de no renovación está expresamente prevista en los propios tratados, así como en la Convención de Viena de 1969, que, a su vez, se refiere a las disposiciones de los respectivos tratados.