Walter Ottavianelli, titular de Puerto Frío, una empresa familiar que desde hace 20 años se especializa en el proceso de pre-enfriado, congelado, conservación y consolidación de cargas tanto secas como refrigeradas.
Por Adrián Luciani / Argenports.com
aedgarluciani@gmail.com
Dando respuesta al aumento de buques pesqueros que descargan en el puerto de Bahía Blanca, la empresa Puerto Frío acaba de inaugurar una nueva terminal y sala de consolidado de contenedores en esa estación marítima bonaerense.
La nueva terminal A dispone de cuatro bocas para carga y consolidado, las que se suman a las dos existentes en la terminal B, ambas ubicadas a metros de muelle Ministro Carranza (ex Muelle Nacional), en Ingeniero White.
La pesca volvió a ser una opción de peso para el puerto bahiense un puñado de años atrás.
En tal sentido, en 2019, y después de cinco años, volvió a descargar un pesquero de altura, el Soho Maru, un potero de Argenova, y desde allí la actividad no sólo no se detuvo sino que no para de crecer.
De hecho ahora se encuentra el Argenova XXIII descargando 90 toneladas de pescado.
El acto de inauguración fue encabezado por el presidente del Consorcio de Gestión del Puerto, Federico Susbielles, y por el titular de la firma, Walter Ottavianelli, quien destacó no sólo el incremento de las operaciones con pescado, sino también carne vacuna.
A la izquierda, Federico Susbielles, y a la derecha Walter Ottavianelli, con dos de sus hijos, en el tradicional corte de cintas.
En tal sentido, destacó el vínculo con la provincia de La Pampa y señaló que la firma está conformando una sociedad que operara en la provincia de Tarragona, más precisamente en la ciudad de Cambrils, sobre unas instalaciones frigoríficas, para la distribución de carnes de Argentina en esa zona del mar Mediterráneo.
“Las exportaciones de carne y sus derivados, formaran parte del futuro de Puerto Frio, sin dudas”, puntualizó Ottavianelli
También precisó que las exportaciones que se realizan por las instalaciones ubicadas en el puerto bahiense de Ingeniero White, en el muelle Carranza, generan un ingreso al país de más de 60 millones de dólares anuales y más de 18.000 jornales de trabajo directo entre las distintas actividades.
“Además del trabajo y las inversiones que generan las empresas del rubro de la pesca, el impacto económico y social sobre la comunidad es importantísimo”, subrayó.
En otro tramo de su alocución, Ottavianelli agradeció el apoyo del directorio y ejecutivos del puerto de Bahía Blanca, en especial de su titular, Federico Susbielles, así como también a las empresas Grupo Iberconsa y Grupo Argenova, miembros de la Cámara de Permisionarios, trabajadores de Puerto Frío y organismos de control como Senasa y AFIP.
“Quiero agradecer a mi amigo Jorge, a mi familia, a mi esposa y a mi madre aquí presente. En lo que respecta a los trabajadores, la comisión directiva del SUPA aquí representada, se merece un párrafo especial. Sobre todo, un amigo y un compañero, que ha sido promotor de los cambios indispensables para lograr una actividad eficiente y convocante de cargas.
“Pido un aplauso para los trabajadores del puerto de Bahía Blanca, del primero al último. Para todos ellos”, agregó.
Luego señaló que la administración de la empresa, una firma familiar, con cinco generaciones, radicada hace 20 años en el puerto bahiense, está bajo la conducción de su hijo mayor.
“Solo quienes comparten ese privilegio, podrán entender lo que se siente. Una carrera de posta, de mano en mano. Donde nuestros abuelos y padres imaginaron un futuro mejor para nosotros y nosotros para nuestros hijos. La paz de saber que nuestra existencia no fue en vano, sino que conforma un todo.
“Estas instalaciones estratégicas que forman parte de un impresiónate complejo portuario, significan una vía integrada de comercio internacional, un vínculo abierto al mundo.
“Sin dudas –continuó--, el futuro de nuestro país, vuelve a estar del otro lado de ese inmenso océano. Estamos mejor preparados que nunca para ese desafío. Por lo tanto, dejamos inaugurada esta vía, para ejercer el comercio, de todos los productos contemplados en el nomenclador aduanero nacional, que requieran de conservación en frio”.
Cabe recordar que en junio pasado el Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca firmó el contrato de concesión con Puerto Frio para la explotación de las instalaciones frigoríficas próximas al muelle Ministro Carranza.
La empresa ya se encontraba operando en la terminal portuaria con un permiso de uso y ahora podrá explotarlas hasta 2041 con el propósito de almacenar y despachar productos que requieran refrigeración y eventualmente, también otros que no requieran servicio de frío.