A más de medio siglo de otra cruzada similar, Bahía Blanca volvió a unirse por el GNL

01 junio 2024

El proyecto que encabezan YPF – Petronas volvió a congregar, como sucedió en 1969 con otra gran inversión industrial, a todas las fuerzas de la ciudad sin distinciones políticas ni personales. 


Buque regasificador en Bahía Blanca, puerto que tiene una larga tradición operando GNL. Foto Argenports.com


Por Adrián Luciani 

aedgarluciani@gmail.com

   Durante los últimos días la dirigencia de Bahía Blanca vino poniendo de manifiesto una cohesión que no exhibía desde hace más de medio siglo y decidió cerrar filas en pos de lograr que el megaproyecto de GNL que impulsan YPF y Petronas se concrete en el puerto local, tal como estaba previsto.

   Y hay que remontarse a fines de los ’60 para divisar una comunión de intereses semejante, un momento en el que las principales fuerzas políticas y las instituciones más poderosas de la ciudad, se hayan encolumnado sin distinciones de ningún tipo  detrás de alguna iniciativa común.

   En aquella oportunidad, año 1969 para ser más precisos, el objetivo que reunió a los bahienses fue la concreción del mayor polo petroquímico del país, una meta equivalente al megaproyecto de GNL que hoy también pretende lograr la provincia de Río Negro, en Punta Colorada.

   Como decíamos, hace ya 55 años, más de 120 entidades unidas, firmaron un escrito dirigido al presidente de la Nación apoyando la radicación de la industria petroquímica en Bahía Blanca.

   El pedido fue rubricado por entidades como Unión de Almaceneros, Círculo de Periodistas Deportivos del Sur, Centro de Consignatarios, Centro de Ingenieros, CGT Regional, Asociación Bahía Blanca de Pie, Liga del Sur, Rotary club, la Confederación de Sociedades de Fomento, Sindicato de choferes, SMATA, Asociación Médica, Asociación Empleados de Comercio, etc, etc.

   Incluso, según señalan las crónicas periodísticas de aquella época, esa férrea defensa del proyecto se renovó en octubre de 1969, cuando los gobernadores patagónicos reunieron sus fuerzas en contra de la radicación del Polo, argumentando que el mismo generaría el cierre de la fábrica que la firma Indupa poseía en Cinco Saltos.

   Allí, como respuesta, ochenta entidades bahienses unieron sus voces para "defender esa radicación que servirá para promover el desarrollo de toda la región del Comahue".

   Evidentemente, el caso le daría la razón al filósofo italiano Giambattista Vico, quien hace ya varios siglos aseguró que la historia no avanza de forma lineal, impulsada por el progreso, sino en forma de ciclos que se repiten, es decir, una espiral en la que todo regresa, aunque no precisamente con el mismo formato.

   Pero cuestiones historiográficas al margen, lo cierto es que en los últimos días la localización de la planta de GNL en el puerto bahiense no ha dejado de sumar apoyo, incluso por parte de la región.

   En tal sentido, cuando parecía que Bahía Blanca estaba sola frente a la existencia de un poderoso lobby en el sur dispuesto a llevarse a Punta Colorada el proyecto, más allá de lo que indican las cuestiones técnicas, comenzaron a conocerse expresiones extralocales a favor del emplazamiento en el puerto bahiense.

   Entre ellas sobresale, sin dudas, la fuerte expresión de apoyo realizada esta semana por el gobernador Axel Kicillof, quien mediante un decreto, declaró de interés provincial a la iniciativa expuesta por YPF – Petronas para la instalación de una planta de licuefacción en Bahía Blanca.

   El mandatario dijo que el complejo portuario local cuenta, para tal fin, con terminales especializadas, infraestructura moderna y tecnología de punta, siendo una referencia a nivel nacional y regional, garantizando la navegabilidad todos los días del año y contando con conectividades terrestres desarrolladas.

   Además mencionó que la zona de influencia de Bahía Blanca posee un entramado productivo maduro donde conviven grandes, medianas y pequeñas empresas vinculadas al sector hidrocarburífero y petroquímico.

   Y luego el apoyo vendría del ministro de la Producción bonaerense, Augusto Costa, quien señaló que Bahía Blanca tiene todas las condiciones para albergar el gran proyecto de licuefacción que impulsan YPF y Petronas.

   En tal sentido, aunque sin mencionar un eventual traslado de la inversión a Punta Colorada, señaló que la Provincia de Buenos Aires no ve ningún motivo como para que la localización bahiense sea puesta en cuestión.

   “La potencialidad y la conveniencia de Bahía Blanca para albergar este proyecto es indiscutible por el desarrollo de sus empresas, por su fuerza de trabajo calificado, por sus centros de formación especializada, por la trascendencia regional de su polo petroquímico y por sus capacidades portuarias”, argumentó.

   A esto debe sumarse el apoyo de diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires como la bahiense Karina Banfi, que presentó un proyecto para que el gobierno nacional construya la planta en el puerto local, iniciativa reunió las firmas de diputados libertarios, del Pro e incluso de Unión por la Patria.

   Entre ellos se destacan José Luis Espert, María Eugenia Vidal, Hernán Lombardi, Marcela Campagnoli, Eduardo Finocchiaro, Nicolás Massot, Florencio Randazzo, Sergio Palazzo y Victoria Tolosa Paz.

   Y volviendo a la provincia, tras la muy firme y decidida movida local encabezada por el intendente Federico Susbielles,  en conjunto con el titular de la Cámara de Diputados provincial, el montehermoseño Alejandro Dichiara, la concreción de la iniciativa en Bahía Blanca también recibió un fuerte apoyo de la Legislatura, declarándola en el caso del Senado, de máximo interés.

   La presencia en La Plata de las distintas fuerzas políticas locales  representadas por legisladores, concejales y funcionarios municipales,  junto con las principales entidades empresarias, fue muy significativa y puso de manifiesto una unión no antes vista en las últimas décadas.

gnl bahia

   A esto deben sumarse las expresiones de apoyo por parte de municipios y entidades de la zona, sobre todo la del jefe comunal rosaleño Rodrigo Aristimuño, entre otros.

   Durante el encuentro en la capital provincial, el intendente Susbielles enfatizó en la necesidad de que la planta de GNL se ubique en Bahía Blanca.

   “Lo que está más que claro es que para esta etapa del proyecto hay una superioridad muy marcada del proyecto de Bahía Blanca sobre otra alternativa. Punta Colorada hoy no es un puerto, es un lugar que no tiene radicación industrial ni ruta que llegue, está a 30 km cualquier emplazamiento de ciudad, su muelle hace años que no tienen ningún tipo de actividad”, aseguró.

   “Nos parece que la discusión es eminentemente técnica. Estoy en otro espacio político que el del Presidente (Milei), pero tenemos que compartir la mirada de un Estado eficiente, de tomar las mejores decisiones para Argentina. En este momento, en que el país necesita producir y generar dólares, necesita agregar valor a sus exportaciones, el Puerto de Bahía Blanca es más rápido, es más competitivo y es una mejor solución para Argentina”, agregó.

   En tanto, para Alejandro Dichiara, “esto es una cruzada que tenemos que apoyar entre todos, desde lo institucional y lo político, para que la inversión más importante de los últimos años de la Argentina pueda cristalizarse en la provincia de Buenos Aires”.

Algunas voces bahienses

   Tras el encuentro, el titular de la Unión Industrial Bahía Blanca, Gustavo Elías, opinó que la ciudad “ha dado una muestra cívica de cómo puede pelear por su futuro” y aseguró que Bahía “está en carrera” para conseguir la instalación de la planta de licuefacción.

   En su opinión, al momento de decidir dónde se instale “van a primar los números” y dijo que “todas las fuerzas representativas de la ciudad” están trabajando en forma mancomunada para que el proyecto termine llevándose a cabo en el puerto local.

   “Hemos dado una muestra cívica de cómo la ciudad puede pelear por su futuro -afirmó-. Bahía Blanca tiene todas las condiciones para que este proyecto se lleve a cabo acá”, expresó en comunicación con el programa Noticias en Compañía, que se emite por LU2.

   Además, en clara referencia a la localidad rionegrina de Punta Colorada, dijo que las potenciales ventajas que puede poseer son “un salto al vacío”, mientras que Bahía Blanca y su hinterland constituyen hace muchos años una realidad.

   Por su parte, al exponer ante los legisladores en la Plata, el presidente de la Bolsa de Comercio de Bahía Blanca, Oscar Marbella, puntualizó:

   “Quizás aquí hay una preocupación transversal a todos nosotros que es lo que se viene hablando ante el eventual cambio de localización, tenemos que preguntarnos si esta misma preocupación no hace al socio externo de este proyecto. La preocupación tiene que ser creciente para Malasia y para Petronas”.

   Además, destacó la importancia de la ley de GNL, con media sanción en Diputados, en 2023, donde se hace clara su localización Bahía Blanca y luego, en declaraciones en el programa Allica y Prieta, de La Nueva Play, aseguró que "el beneficio del proyecto es absolutamente abarcativo".

   "Representa mucha más actividad, empleo para todos, una repercusión en todo los órdenes. Uno aspira a que así como Bahía Blanca le dio su apoyo a las fuerzas del cielo, ahora las fuerzas del cielo sean justas y no una desgracia para nuestra región", ironizó.

   Por su parte, Maximiliano Abraham, presidente de la Bolsa de Cereales y Productos, sostuvo que no existe motivo alguno para trasladar de Bahía Blanca a Punta Colorada el gran proyecto de exportación de GNL que encabezan YPF y Petronas.

   “No hay cuestiones ni lógicas, ni técnicas, ni de ningún tipo de índole, digamos racionales, que justifiquen la idea o la posibilidad de un eventual traslado. Desde las instituciones vamos a hacer todo lo posible para que el proyecto quede en la ciudad, porque es lo más racional y lo que mejor le puede hacer al país”, señaló en diálogo con el sitio de noticias portuarias Argenports.com

   En la misma dirección también se pronunció Jorge Bonacorsi, presidente de la Corporación de Comercio, Industria y Servicios (CCIyS), quien afirmó que en base al sentido común, el proyecto debería desarrollarse en Bahía Blanca y no en Punta Colorada.

   "Acá hay intereses políticos y económicos que intentan desviar. Desde el punto de vista técnico es indiscutible el lugar, está resuelto. El sentido común dice que es Bahía Blanca, pero estamos en Argentina y este tipo de operatorias existe", señaló en el programa Panorama, de LU2.

   "Desde el primer día dije que para mí esto va muchos más allá de la claridad técnica que justifica el emplazamiento en Bahía Blanca. Siempre dije que había que tener mucho cuidado con que la política no meta la cola en prejuicio del proyecto, el intendente lo tiene claro", sostuvo.

   Hasta ahora la pelota sigue en juego y está claro que la dirigencia bahiense no está dispuesta a perder un proyecto por el cual su puerto ha venido trabajando desde hace años, el mismo puerto al que recurrió el país durante casi una década para operar las cargas de GNL con las que se mitigó la crisis energética, y lo más importante, con seguridad y eficiencia.

   Fuente: La Nueva.