Desde el ente portuario ven potencialidad para brindar servicios a la logística de embarque de granos. Foto CGPLP.
Redacción Argenports.com
Hace tiempo que las autoridades del Consorcio de Gestión Puerto La Plata vienen pensando en la posibilidad de atraer inversiones destinadas a la exportación de granos.
De hecho hace un par de años que su titular, el ingeniero José María Lojo insiste en las bondades de esa terminal fluvial bonaerense para convertirse en una opción válida frente a las asentadas en el río Paraná y, con la obra del Canal Magdalena ejecutada, podría evitar completamientos de bodegas en los puertos de Quequén y Bahía Blanca.
“Hay mucho espacio disponible en esta terminal portuaria, establecida en el año 1890 como un puerto de aguas profundas. Fue planificado para que sea así. Dentro del Río de la Plata, es el puerto que está más cercano al mar”, señaló.
En tal sentido, desde el ente portuario ven potencialidad para brindar servicios a la logística de embarque de granos.
"Tenemos muchos espacios disponibles, algunos con infraestructura y otra para crear", dijo Lojo. Foto Argenports.com
“Cuando tenemos una alta producción agrícola, como se espera para esta campaña, los puertos habituales empiezan a tener problemas de saturación. A pesar de la magra cosecha hoy en día los puertos de Quequén y Bahía Blanca están usando buena parte de su capacidad y los puertos del Paraná tienen las complicaciones de la bajante”, señaló Lojo en declaraciones al diario Clarín.
En ese contexto, el funcionario dijo estar convencido de que el Puerto La Plata puede ayudar como una alternativa, especialmente para la producción bonaerense.
“Tenemos muelles disponibles con profundidades interesantes, que mejoran lo que se puede cargar en cualquier lugar del río Paraná. Solamente es cuestión de que quienes tengan cargas de granos estén interesados en embarcar desde La Plata”, señaló.
--¿Ya hay instalaciones disponibles para embarcar granos?, se le preguntó.
--“Ya tenemos los muelles, los canales, los amarres y todos los servicios para los buques. Todo eso ya está. También tenemos galpones que pueden ser utilizados como bateas para almacenamiento de grano.
“Pero tenemos también espacios donde se podrían poner, por ejemplo, silos australianos expandibles para manejar los stocks y las densidades de carga. Y también hay dispositivos móviles de carga. Hay operadores que están especializados en eso y en determinadas circunstancias están en condiciones de actuar si fuera necesario”.
Agregó que con todo se pueden ampliar las instalaciones, incluso de mayor magnitud.
“En la medida que actores privados vean que resulta rentable la operación, seguramente se va a interesar en los terrenos y los muelles y las instalaciones que tenemos disponible para eso. Puede ser interesante para las agroexportadoras como las que están instaladas en el Gran Rosario u otras de menor escala, como acopiadoras que están más cerca de nuestro puerto. Se pueden evitar fletes largos. Les convendría mucho más llevarlo al puerto más accesible, más cercano”, precisó.
Luego, al ser consultado sobre cuándo podría empezar a operar con embarques de granos, Lojo dijo que el puerto ya puede operar con cereal.
“Se estuvieron contemplando alternativas que finalmente no se concretaron, pero se abrió el panorama para empezar a hacer los contactos con los distintos actores de la actividad. Hay un actor que es el que tiene el grano en su silo o en su campo. Hay otro actor que es quien compra ese grano y que tiene un destino de exportación. Y hay otro actor, el operador portuario que recibe ese grano, contrata un barco y lo llena”.
A su entender, los volúmenes a operar pueden ser variados.
“Ahora, con las instalaciones disponibles, podemos pensar en operaciones de hasta 2 millones de toneladas. Pero en un futuro puede ampliarse mucho más. Los embarques se pueden hacer con una instalación de alta productividad, como las que existen hoy, con los elevadores de granos y los sistemas que tienen las grandes empresas.
“Es una inversión realizable –continuó--, se puede hacer en un par de años, pero también hay otros mecanismos para pequeñas cargas que se pueden aplicar”.
En cuanto al canal Magdalena, dijo que el 31 de julio se abren los sobres de la licitación técnica para hacer la obra.
“Eso abriría un panorama aún más beneficioso, porque ese canal tendría mayor profundidad que el Río Paraná entonces tendremos la posibilidad de cargar barcos completos en La Plata, barcos que tienen una necesidad de 12 o 13 metros de profundidad de calado.
“Estamos hablando de 38 a 45 pies, que no se pueden alcanzar en el Paraná y es lo que necesitan los barcos cerealeros para salir completos. Normalmente un barco está saliendo de la zona del Gran Rosario con 40 mil toneladas, y tienen que ir aquí a Quequén para completar carga, de los 60/70 mil toneladas que pueden llevar. En un futuro, con el Canal Magdalena, en dos o tres años eso estaría resuelto. También se podría cargar en La Plata. Hay varias mejoras que podrían suscitarse”, consideró.
Bahía Blanca / Buenos Aires / Argentina
